martes, 27 de abril de 2010
Andrés Pacheco
(Puebla de Montalbán, 1550-Madrid, 1626) Eclesiástico español. Doctor por Alcalá, fue obispo de Segovia, cardenal arzobispo de Toledo, en nombre del archiduque Alberto, y obispo de Cuenca. En 1622 fue nombrado inquisidor general y patriarca de las Indias Occidentales.
Alonso Pacheco
(s. XVI) Militar y conquistador español. Acompañó a Jorge Spira en la toma de posesión de éste del cargo de gobernador de Venezuela en sustitución de Alfinger (1535) y en las luchas contra los indios que hostigaban a los españoles en las llanuras. Desde 1541 hasta 1546 estuvo al servicio de Felipe de Hutten, hasta su asesinato por Juan de Carvajal. En 1549 tomó parte en la fundación de la ciudad de Borburata, de la que más adelante sería nombrado regidor. En 1571, tras someter a los indígenas de la zona, fundó la ciudad de Nueva Zamora a orillas del lago Maracaibo.
Melchor Pacheco y Obes
(Buenos Aires, 1805- id., 1855) Militar y político uruguayo. Luchó contra la ocupación brasileña (1825). Ministro de Guerra (1843), organizó la defensa de Montevideo cuando se produjo el sitio de la capital por las tropas de Oribe (1843) durante la guerra Grande. En 1853 apoyó el golpe de estado de Venancio Flores.
Joaquín Francisco Pacheco
(Joaquín Francisco Pacheco y Gutiérrez Calderón; Écija, 1808-Madrid, 1865) Jurisconsulto y político español. Católico moderado, se opuso a Narváez por considerarlo demasiado reaccionario y encabezó el grupo de los puritanos que buscaba una conciliación entre progresistas y moderados. En 1847 formó un Gobierno de puritanos que fracasó y en 1864 fue ministro de Estado en el Gobierno conservador de Mon-Cánovas. Apoyó la desamortización y tuvo una labor destacada en la redacción del Código Penal de 1848. Es autor de Estudios de Derecho Penal (1842-1843), El código penal concordado y comentado (1848), y Comentarios a las leyes de desvinculación (1849).
Jorge Pacheco Areco
(Montevideo, 1921) Periodista y político uruguayo. Fue director de El día, vicepresidente del país con el general Gestido y, a la muerte de éste, presidente (1967-1972). Su mandato estuvo marcado por los ajustes económicos, el malestar social y las acciones de los «tupamaros». Acabado su gobierno, fue nombrado embajador en diversos países.
Familia Pacheco
Familia aristocrática castellana de origen portugués.
Fernán Ruiz Pacheco (fines s. XIII), señor de Ferreira, en Portugal, es el primero de sus miembros conocidos con seguridad.
Lope Fernández Pacheco, nieto de Fernán Ruiz Pacheco y señor de Ferreira, fue merino mayor de Portugal y valido de Alfonso IV y de Pedro I.
Diego López Pacheco el Grande, hijo de Lope Fernández Pacheco, señor de Ferreira, se trasladó a España durante el reinado de Enrique II, convirtiéndose en señor de Béjar.
Lope Fernández Pacheco, hijo de Diego López Pacheco, fue padre del primer señor de Cerralbo.
Juan Fernández Pacheco, primogénito de Diego López Pacheco, se convirtió en el primer señor de Belmonte.
María Pacheco, hija de Juan Fernández Pacheco e Inés Téllez de Meneses, pasó a ser señora de Belmonte y casó con Alonso Téllez de Girón.
Pedro Girón, hijo de María Pacheco, fue maestre de la Orden de Calatrava y progenitor de la rama de los duques de Osuna.
Juan Pacheco, hijo de María Pacheco, llegó a ser valido de Enrique IV de Castilla, primer marqués de Villena y duque de Escalona.
Francisca Pacheco, hija de Juan Pacheco, casó con Íñigo López de Mendoza, conde de Tendilla.
Esteban Pacheco, hijo de Lope Fernández Pacheco, fue nombrado por Enrique II de Castilla primer señor de Cerralbo (1379).
Rodrigo Pacheco Osorio de Toledo, recibió de Carlos V el título de marqués de Cerralbo (1533).
Juan Pacheco Osorio (?-Colibre, 1589), hijo de Rodrigo Pacheco Osorio de Toledo y segundo marqués de Cerrato, derrotó a F. Drake durante el sitio de La Coruña.
Rodrigo Pacheco Osorio (1580-1640), tercer marqués de Cerralbo, fue capitán general de Galicia, como su padre y su abuelo, y más tarde virrey de México.
Juan Pacheco Osorio (?-Madrid, 1680), hijo de Rodrigo Pacheco Osorio, murió sin descendencia.
Leonor Pacheco Osorio (?-1689), prima hermana de Juan Pacheco Osorio, heredó de él el marquesado de Cerralbo. Al morir también sin descendencia, el título pasó a Fernando Nieto de Silva y Pacheco Ruiz Contreras, de la casa de los condes de Alba de Yeltes.
Fernán Ruiz Pacheco (fines s. XIII), señor de Ferreira, en Portugal, es el primero de sus miembros conocidos con seguridad.
Lope Fernández Pacheco, nieto de Fernán Ruiz Pacheco y señor de Ferreira, fue merino mayor de Portugal y valido de Alfonso IV y de Pedro I.
Diego López Pacheco el Grande, hijo de Lope Fernández Pacheco, señor de Ferreira, se trasladó a España durante el reinado de Enrique II, convirtiéndose en señor de Béjar.
Lope Fernández Pacheco, hijo de Diego López Pacheco, fue padre del primer señor de Cerralbo.
Juan Fernández Pacheco, primogénito de Diego López Pacheco, se convirtió en el primer señor de Belmonte.
María Pacheco, hija de Juan Fernández Pacheco e Inés Téllez de Meneses, pasó a ser señora de Belmonte y casó con Alonso Téllez de Girón.
Pedro Girón, hijo de María Pacheco, fue maestre de la Orden de Calatrava y progenitor de la rama de los duques de Osuna.
Juan Pacheco, hijo de María Pacheco, llegó a ser valido de Enrique IV de Castilla, primer marqués de Villena y duque de Escalona.
Francisca Pacheco, hija de Juan Pacheco, casó con Íñigo López de Mendoza, conde de Tendilla.
Esteban Pacheco, hijo de Lope Fernández Pacheco, fue nombrado por Enrique II de Castilla primer señor de Cerralbo (1379).
Rodrigo Pacheco Osorio de Toledo, recibió de Carlos V el título de marqués de Cerralbo (1533).
Juan Pacheco Osorio (?-Colibre, 1589), hijo de Rodrigo Pacheco Osorio de Toledo y segundo marqués de Cerrato, derrotó a F. Drake durante el sitio de La Coruña.
Rodrigo Pacheco Osorio (1580-1640), tercer marqués de Cerralbo, fue capitán general de Galicia, como su padre y su abuelo, y más tarde virrey de México.
Juan Pacheco Osorio (?-Madrid, 1680), hijo de Rodrigo Pacheco Osorio, murió sin descendencia.
Leonor Pacheco Osorio (?-1689), prima hermana de Juan Pacheco Osorio, heredó de él el marquesado de Cerralbo. Al morir también sin descendencia, el título pasó a Fernando Nieto de Silva y Pacheco Ruiz Contreras, de la casa de los condes de Alba de Yeltes.
Pachacuti Inca Yupanqui
(Pachacuti o Pachacútec Inca Yupanqui; ?-?, 1471) Primer soberano del llamado Imperio histórico Inca (1438-1471). Dotado de un gran talento militar, inició la expansión del Imperio Inca más allá de las fronteras del Perú actual: hacia el norte, conquistó los reinos chimú y de Quito, y por el sur llegó hasta el valle de Nazca. A fin de imponer su dominio sobre un complejo mosaico de más de 500 tribus, con lenguas, religiones y costumbres dispares y radicadas en áreas geográficas distantes, Pachacuti Inca Yupanqui reprimió con extrema dureza las rebeliones de los pueblos sometidos y no dudó en deportar a los grupos más conflictivos lejos de sus regiones de origen.
No fue, sin embargo, un mero conquistador, ya que también supo dotar a su Estado de una sólida y eficaz estructura administrativa. Así, por ejemplo, organizó las ciudades conquistadas según el modelo inca y encomendó su gobierno a una jerarquía de funcionarios que habían de rendir cuentas de su gestión en Cuzco, la capital del Imperio, que durante el reinado de Pachacuti superó los 100.000 habitantes. De hecho, todos los cargos importantes eran desempeñados por funcionarios de origen inca, mientras que los gobiernos regionales estaban en manos de miembros de la familia real.
En los últimos años de su vida, Pachacútec confió la dirección de las campañas militares a su hijo Topa Inca, en tanto que él se dedicaba a supervisar la construcción de algunos de los monumentos más importantes de la cultura inca, como el Templo del Sol, en Cuzco, la ciudadela de Sacsahuaman, cerca de la capital, y Machu Picchu, la ciudad-fortaleza enclavada sobre el valle del río Urubamba. A este soberano se atribuye también la adopción del sistema de cultivo en terrazas, que caracterizó el sistema agrícola incaico.
No fue, sin embargo, un mero conquistador, ya que también supo dotar a su Estado de una sólida y eficaz estructura administrativa. Así, por ejemplo, organizó las ciudades conquistadas según el modelo inca y encomendó su gobierno a una jerarquía de funcionarios que habían de rendir cuentas de su gestión en Cuzco, la capital del Imperio, que durante el reinado de Pachacuti superó los 100.000 habitantes. De hecho, todos los cargos importantes eran desempeñados por funcionarios de origen inca, mientras que los gobiernos regionales estaban en manos de miembros de la familia real.
En los últimos años de su vida, Pachacútec confió la dirección de las campañas militares a su hijo Topa Inca, en tanto que él se dedicaba a supervisar la construcción de algunos de los monumentos más importantes de la cultura inca, como el Templo del Sol, en Cuzco, la ciudadela de Sacsahuaman, cerca de la capital, y Machu Picchu, la ciudad-fortaleza enclavada sobre el valle del río Urubamba. A este soberano se atribuye también la adopción del sistema de cultivo en terrazas, que caracterizó el sistema agrícola incaico.
Isidoro Pacense
(s. VIII) Prelado e historiador español. Se le atribuye la Crónica mozárabe de 754 o Crónica pacense.
Niccolò Paccanari
(Valsugana, s. XVIII-Roma, después de 1809) Religioso italiano. Eremita, fundó la Compañía de los Padres de la Fe, destinada a reagrupar a los jesuitas dispersos (1797); sin embargo, las divisiones internas y su incapacidad administrativa provocaron la decadencia de la agrupación, cuyos miembros, en su mayoría, se integraron en la Compañía de Jesús tras su restablecimiento en 1814.
Nikolaus Franz von Pacassi
(Nikolaus Franz von Pacassi o Paccassi; Wiener Neustadt, 1716-Viena, 1790) Arquitecto austríaco. Primer arquitecto de la corte de la emperatriz María Teresa, en su obra se advierte la influencia del clasicismo francés. Colaboró con I. de Valmagini en la decoración del palacio de Schönbrunn, construyó la Academia de Wiener-Neustadt y el palacio de Klagenfurth y sucedió a J.N. Nador en la construcción del Hofburg de Viena.
viernes, 9 de abril de 2010
Georg Wilhelm Pabst
(Raudnitz, 1885 - Viena, 1967) Director de cine alemán. Hijo de un ferroviario, Georg Wilhelm Pabst rechazó ejercer sus estudios de ingeniería, como deseaba su padre, y se orientó pronto hacia el más inestable campo de la interpretación. Consiguió entrar como aprendiz en una modesta compañía teatral y a los dieciocho años participó en montajes por Austria y Alemania. En 1910 emigró a los Estados Unidos e ingresó en la Compañía del Teatro Popular Alemán de Nueva York, donde alternó sus trabajos como actor con la ayudantía de dirección escénica.
El elevado número de la colonia alemana residente en Nueva York hizo posible que esta compañía representara sus obras en lengua germana, y allí Pabst comenzó a labrarse una considerable reputación como director de escena. En 1914 fue enviado a Alemania para contratar nuevos actores dispuestos a incorporarse a la compañía, y de paso por París le sorprendió el estallido de la Primera Guerra Mundial. Recluido en un campo de concentración durante cuatro años, pasó por difíciles situaciones personales que dejaron una huella profunda en su posterior vida y obra cinematográfica.
Una vez liberado se estableció en Viena, donde dirigió el Neuer Wiener Theater, especializado en el género "Kammerspiel". La falta de medios económicos es suplida con imaginación, y relanza la interrumpida carrera de Pabst. Sus montajes intimistas y la profundización en la psicología de los personajes le convierten en fruto apetecible para las empresas cinematográficas, en un momento en el que se está evolucionando hacia películas más densas y elaboradas. Es por ello que en 1921 Pabst funda en Berlín, con su amigo Carl Froelich, una productora que empieza sus actividades con In banne der kralle, donde el futuro cineasta interviene como actor.
Tras unos cuantos trabajos como ayudante de Froelich accede a la dirección en 1923 con Der schatz, historia de la búsqueda de un tesoro que entronca con otros filmes de la época y que le permite conocer los rudimentos del medio sin grandes riesgos. Este título prefigura, no obstante, algunos rasgos que posteriormente desarrolló a lo largo de su carrera: el odio entre personas como consecuencia de la falta de dinero, el naturalismo en la descripción de los sentimientos o la imparable fuerza del amor y el erotismo. A Der schatz le seguirá La condesa Donelli, típico largometraje de encargo para el que se pedía poco más que oficio y cierta elegancia narrativa.
Es a partir de su matrimonio con la joven y culta Gertrude Hennings cuando dio el salto definitivo que le situó en poco tiempo como uno de los artistas fundamentales del cine mundial. Apenas finalizada su luna de miel rueda la mítica Bajo la máscara del placer, donde presenta las devastadoras consecuencias físicas y morales de cualquier guerra, asunto que desgraciadamente le era muy cercano al propio Pabst.
Con ella obtiene un enorme éxito de público que le permite desarrollar un proyecto inspirado en las teorías psicoanalíticas de Sigmund Freud, Geheimnisse einer seele. Dicha doctrina estaba en su momento de apogeo, y de hecho varios discípulos directos de Freud participaron como asesores en el rodaje de una película que planteaba un argumento audaz para la época, como lo serían otros muchos de los posteriores materiales con los que trabajó Pabst: la influencia de los celos en la impotencia sexual masculina.
Con Sendas del pecado, en 1928, inició una trilogía erótica de fama mundial que le afianzaría como uno de los cineastas de universo más atormentado y escéptico. Su negativa visión de la sociedad y su ideología socialdemócrata se mezclan para crear unos largometrajes donde los ricos salen malparados y la pobreza es vista como algo que conduce de manera inexorable a la prostitución carnal o moral. La liberación sexual de las mujeres es uno de los escasos elementos positivos que aparecen en el horizonte, aun siendo un arma de doble filo si se utiliza mal, puesto que, como en La caja de Pandora, podrían esparcirse mayores desgracias por el universo.
Aunque ocasionalmente Pabst volvió al filme de género, caso de Prisioneros de la montaña, protagonizada por la que más tarde sería realizadora nazi Leni Riefensthal, su obra fue volviéndose más ambiciosa tanto en lo económico como en su deseo de golpear con agresividad las conciencias de una sociedad podrida. Si Cuatro de infantería marca uno de sus mayores éxitos de crítica y de taquilla, no le queda atrás La comedia de la vida, basada en una obra teatral de Bertolt Brecht, con quien mantuvo fuertes discrepancias durante la fase de preparación que llevaron finalmente a que éste renunciara a participar en el proyecto.
La sátira implacable de instituciones como la iglesia, la justicia o la policía y el humor corrosivo contra el capitalismo y la moral hipócrita suscitó una polémica de considerable alcance en Europa. Carbón, en cambio, apenas tuvo fortuna en las taquillas aunque Pabst firmaba con ella una de sus obras más perfectas. Pero el público empezaba a cansarse de las películas de agitación política y se decantaba, incluso los más humildes trabajadores, por comedietas o dramas sensibleros.
Este fracaso le empuja a emprender la aventura fuera de Alemania, primero en Francia (donde rueda La Atlántida y una de las mejores versiones jamás realizadas de Don Quijote) y después en Estados Unidos, donde contratado por la Warner Bros consume su tiempo sin apenas oportunidades de trabajo. Desilusionado, retorna a Europa y peregrina de Francia a Italia o Austria buscando productores interesados en financiar las películas de un cineasta que en los años veinte y treinta había conseguido cuantiosos éxitos críticos y de público.
El ascenso del nazismo provoca su retorno a Alemania, donde intenta al principio trabajar ofreciendo su visión política socialdemócrata y más tarde se da cuenta de que debe moderar sus planteamientos para evitarse problemas. Rueda bajo estos condicionantes una serie de películas históricas (Comediantes, Paracelsus) que en parte incomodan al régimen de Hitler pero que por otro lado son instrumentalizadas como símbolo de las presuntas libertades de las que gozan los creadores en Alemania. Cansado de batallar, marchó de nuevo a otros países como Austria o Italia, donde cada vez con mayores dificultades logró sobrevivir haciendo un cine insustancial en el que se reconoce con dificultades la grandeza creativa de un mito como Pabst.
El elevado número de la colonia alemana residente en Nueva York hizo posible que esta compañía representara sus obras en lengua germana, y allí Pabst comenzó a labrarse una considerable reputación como director de escena. En 1914 fue enviado a Alemania para contratar nuevos actores dispuestos a incorporarse a la compañía, y de paso por París le sorprendió el estallido de la Primera Guerra Mundial. Recluido en un campo de concentración durante cuatro años, pasó por difíciles situaciones personales que dejaron una huella profunda en su posterior vida y obra cinematográfica.
Una vez liberado se estableció en Viena, donde dirigió el Neuer Wiener Theater, especializado en el género "Kammerspiel". La falta de medios económicos es suplida con imaginación, y relanza la interrumpida carrera de Pabst. Sus montajes intimistas y la profundización en la psicología de los personajes le convierten en fruto apetecible para las empresas cinematográficas, en un momento en el que se está evolucionando hacia películas más densas y elaboradas. Es por ello que en 1921 Pabst funda en Berlín, con su amigo Carl Froelich, una productora que empieza sus actividades con In banne der kralle, donde el futuro cineasta interviene como actor.
Tras unos cuantos trabajos como ayudante de Froelich accede a la dirección en 1923 con Der schatz, historia de la búsqueda de un tesoro que entronca con otros filmes de la época y que le permite conocer los rudimentos del medio sin grandes riesgos. Este título prefigura, no obstante, algunos rasgos que posteriormente desarrolló a lo largo de su carrera: el odio entre personas como consecuencia de la falta de dinero, el naturalismo en la descripción de los sentimientos o la imparable fuerza del amor y el erotismo. A Der schatz le seguirá La condesa Donelli, típico largometraje de encargo para el que se pedía poco más que oficio y cierta elegancia narrativa.
Es a partir de su matrimonio con la joven y culta Gertrude Hennings cuando dio el salto definitivo que le situó en poco tiempo como uno de los artistas fundamentales del cine mundial. Apenas finalizada su luna de miel rueda la mítica Bajo la máscara del placer, donde presenta las devastadoras consecuencias físicas y morales de cualquier guerra, asunto que desgraciadamente le era muy cercano al propio Pabst.
Con ella obtiene un enorme éxito de público que le permite desarrollar un proyecto inspirado en las teorías psicoanalíticas de Sigmund Freud, Geheimnisse einer seele. Dicha doctrina estaba en su momento de apogeo, y de hecho varios discípulos directos de Freud participaron como asesores en el rodaje de una película que planteaba un argumento audaz para la época, como lo serían otros muchos de los posteriores materiales con los que trabajó Pabst: la influencia de los celos en la impotencia sexual masculina.
Con Sendas del pecado, en 1928, inició una trilogía erótica de fama mundial que le afianzaría como uno de los cineastas de universo más atormentado y escéptico. Su negativa visión de la sociedad y su ideología socialdemócrata se mezclan para crear unos largometrajes donde los ricos salen malparados y la pobreza es vista como algo que conduce de manera inexorable a la prostitución carnal o moral. La liberación sexual de las mujeres es uno de los escasos elementos positivos que aparecen en el horizonte, aun siendo un arma de doble filo si se utiliza mal, puesto que, como en La caja de Pandora, podrían esparcirse mayores desgracias por el universo.
Aunque ocasionalmente Pabst volvió al filme de género, caso de Prisioneros de la montaña, protagonizada por la que más tarde sería realizadora nazi Leni Riefensthal, su obra fue volviéndose más ambiciosa tanto en lo económico como en su deseo de golpear con agresividad las conciencias de una sociedad podrida. Si Cuatro de infantería marca uno de sus mayores éxitos de crítica y de taquilla, no le queda atrás La comedia de la vida, basada en una obra teatral de Bertolt Brecht, con quien mantuvo fuertes discrepancias durante la fase de preparación que llevaron finalmente a que éste renunciara a participar en el proyecto.
La sátira implacable de instituciones como la iglesia, la justicia o la policía y el humor corrosivo contra el capitalismo y la moral hipócrita suscitó una polémica de considerable alcance en Europa. Carbón, en cambio, apenas tuvo fortuna en las taquillas aunque Pabst firmaba con ella una de sus obras más perfectas. Pero el público empezaba a cansarse de las películas de agitación política y se decantaba, incluso los más humildes trabajadores, por comedietas o dramas sensibleros.
Este fracaso le empuja a emprender la aventura fuera de Alemania, primero en Francia (donde rueda La Atlántida y una de las mejores versiones jamás realizadas de Don Quijote) y después en Estados Unidos, donde contratado por la Warner Bros consume su tiempo sin apenas oportunidades de trabajo. Desilusionado, retorna a Europa y peregrina de Francia a Italia o Austria buscando productores interesados en financiar las películas de un cineasta que en los años veinte y treinta había conseguido cuantiosos éxitos críticos y de público.
El ascenso del nazismo provoca su retorno a Alemania, donde intenta al principio trabajar ofreciendo su visión política socialdemócrata y más tarde se da cuenta de que debe moderar sus planteamientos para evitarse problemas. Rueda bajo estos condicionantes una serie de películas históricas (Comediantes, Paracelsus) que en parte incomodan al régimen de Hitler pero que por otro lado son instrumentalizadas como símbolo de las presuntas libertades de las que gozan los creadores en Alemania. Cansado de batallar, marchó de nuevo a otros países como Austria o Italia, donde cada vez con mayores dificultades logró sobrevivir haciendo un cine insustancial en el que se reconoce con dificultades la grandeza creativa de un mito como Pabst.
Jesús Pabón
(Sevilla, 1902 - Madrid, 1976) Historiador y político español. Realizó sus estudios en las universidades de Granada y Sevilla y en 1935 logró la cátedra de historia contemporánea de la Universidad de Madrid. Fue diputado de la CEDA por Sevilla en 1933 y 1936. Dirigió El Correo de Andalucía. En 1953 ingresó en la Real Academia de la Historia, de la que fue director entre 1971 y 1976. Publicó La revolución portuguesa (1941-1945), Cambó (1952-1968) y Franklin y Europa (1956).
San Pablo
(Tesalónica, c. 300-Capadocia, c. 351) Mártir. Obispo de Constantinopla que combatió la herejía arriana y fue varias veces expulsado de su sede episcopal. Según la tradición, murió estrangulado. Fiesta el 7 de junio.
San Pablo
(en la baja Tebaida, c. 228-?, c. 341) Primer ermitaño. Huérfano a los 15 años, se retiró al desierto de Egipto, donde vivió unos cien años. Fiesta el 15 de enero.
Joaquín de Pablo
(Llamado Chapalangarra; ?-1830) Guerrillero español. Luchó contra los franceses en la guerra de la Independencia a las órdenes de Espoz y Mina. Habiendo emigrado en 1823, al restablecerse el absolutismo, en 1830 penetró en España por Navarra al frente de una partida, que fue derrotada. Murió a consecuencia de las heridas recibidas en la acción.
Pablo VI
(Giovanni Battista Montini Alghisi; Concesio, 1897 - Castelgandolfo, 1978) Papa romano (1963-1978). Ordenado sacerdote en 1920, estudió diplomacia en Roma, entrando a formar parte de la secretaría de Estado vaticana en 1923, tras un breve paso por la nunciatura de Varsovia. Como consiliario eclesiástico de la Federación universitaria tomó parte en los conflictos de esta organización con el régimen de Mussolini.
Durante la guerra, llevó a cabo una importante labor al frente de la Comisión pontificia de asistencia. Su tarea pastoral y sus tendencias renovadoras lo alejaron de la curia vaticana, siendo nombrado arzobispo de Milán en 1954. Fue el primer cardenal nombrado por el papa Juan XXIII, con quien colaboró estrechamente en la organización del concilio Vaticano II. A la muerte del pontífice le sucedió como tal y dio continuidad a la renovación emprendida en la Iglesia.
En 1965 pronunció un importante discurso ante la Asamblea general de la ONU, hechos que constituyeron los primeros hitos de una serie de viajes pastorales en el marco de una amplia política ecuménica y de acercamiento a los problemas del mundo. Al final de su pontificado, no obstante, dio muestras de ceder a las presiones de los sectores más conservadores. En este sentido fueron tomadas sus encíclicas Sacerdotalis coelibatus y Humanae vitae, que aparecieron como un retroceso frente a otras como Ecclesiam suam y Populorum progressio.
Durante la guerra, llevó a cabo una importante labor al frente de la Comisión pontificia de asistencia. Su tarea pastoral y sus tendencias renovadoras lo alejaron de la curia vaticana, siendo nombrado arzobispo de Milán en 1954. Fue el primer cardenal nombrado por el papa Juan XXIII, con quien colaboró estrechamente en la organización del concilio Vaticano II. A la muerte del pontífice le sucedió como tal y dio continuidad a la renovación emprendida en la Iglesia.
En 1965 pronunció un importante discurso ante la Asamblea general de la ONU, hechos que constituyeron los primeros hitos de una serie de viajes pastorales en el marco de una amplia política ecuménica y de acercamiento a los problemas del mundo. Al final de su pontificado, no obstante, dio muestras de ceder a las presiones de los sectores más conservadores. En este sentido fueron tomadas sus encíclicas Sacerdotalis coelibatus y Humanae vitae, que aparecieron como un retroceso frente a otras como Ecclesiam suam y Populorum progressio.
San Pablo Miki
(Kyoto, 1556-Nagasaki, 1597) Mártir jesuita japonés. Ingresó en la Compañía a los 22 años y fue el primer religioso japonés y el primer mártir jesuita nipón. Fue canonizado en 1862. Fiesta el 6 de febrero.
Pablo III
(Alessandro Farnese) Papa (Canino, Estados Pontificios, 1468 - Roma, 1549). Perteneciente a una influyente familia de la nobleza italiana, hizo la mayor parte de su carrera eclesiástica sin ser sacerdote: fue nombrado cardenal en 1493, aunque no se ordenó hasta 1519. Accedió al Papado al morir Clemente VII, en 1534. Fue un príncipe renacentista, mecenas de artistas como Miguel Ángel, a quien encargó los frescos de la Capilla Sixtina (1508-12). En su Corte romana llevó una vida lujosa y practicó el nepotismo, contribuyendo al engrandecimiento de la familia Farnesio. Durante su pontificado se inició la Contrarreforma católica, para hacer frente al cisma protestante: Pablo III reunió el Concilio de Trento (1536), aprobó la fundación de la Compañía de Jesús (1540) y de otras órdenes religiosas, reorganizó la Inquisición romana (1542), puso en marcha la elaboración del primer Índice de libros prohibidos por la Iglesia (que se publicaría en 1559) y apoyó la lucha de Carlos V contra los protestantes alemanes. Su oposición a las ambiciones de Enrique VIII llevó a la ruptura entre el Papado y la Iglesia de Inglaterra, que pasó a estar bajo la autoridad de la Corona inglesa.
Pablo I Petróvich
(San Petersburgo, 1754- id., 1801) Zar de Rusia (1796-1801). Hijo de Pedro III y Catalina II, a la muerte de su padre, su madre impidió que accediera al poder. Temeroso de la influencia revolucionaria francesa, cerró las fronteras del país al influjo liberal. Fue neutral respecto a Francia hasta la intervención de ésta en el Mediterráneo. Cuando se formó la segunda coalición (1798), declaró la guerra a Francia y a España y mandó un ejército al N de Italia. Tras la derrota de Zurich (1799), rompió con los británicos cuando ocuparon Malta, se aproximó a Francia, creó la Liga de los Neutrales contra las pretensiones de Gran Bretaña en el mar Báltico (1800) y preparó una expedición contra los británicos en la India. Murió asesinado.
Pablo I de Grecia
(Atenas, 1901 - 1964) Rey de Grecia, tercer hijo del rey Constantino I. Fue Mayor del ejército griego en la II Guerra Mundial y consejero político del monarca, su hermano Jorge II. Junto al rey y toda su familia huyó tras la ocupación alemana y se refugió en Creta (1941), después pasó a El Cairo y más tarde a Sudáfrica, desde donde colaboró con el gobierno exiliado en Londres. Regresó a su país en 1946 y un año más tarde sucedió a su hermano en el trono. Casado en 1938 con su prima, la princesa Federica Luisa de Brunswick, tuvo tres hijos: Sofía (1938) que llegó a ser reina de España por su matrimonio con Juan Carlos I; Constantino (1940), el último rey de Grecia, y la princesa Irene (1942).
martes, 6 de abril de 2010
Pablo Diácono
(Paul Warnefried, Friul, c. 720-Montecassino, c. 800) Historiador lombardo en lengua latina. Incorporado a la corte de Carlomagno (782-786), escribió De gentis longobardorum, historia de Lombardía desde sus orígenes hasta 744, y Vida de san Gregorio Magno.
Pablo de Yugoslavia
(Pablo Karageorgevic o Paul Karadjordjevic, príncipe de Yugoslavia; San Petersburgo, 1893 - París, 1976) Príncipe regente de Yugoslavia durante los primeros años de la Segunda Guerra Mundial. Fue hijo de Arsen Karageorgevic y de Aurora Paulovna Demidova. El 22 de octubre de 1923 casó con Olga de Grecia, con quien tuvo tres hijos: Alejandro (nacido en 1924), Nicolás (nacido en 1928) y Elizaveta (nacida en 1936). En octubre de 1934 presidió el Consejo de Regencia en nombre de su primo, Pedro II, de once años de edad.
En el interior, el gobierno intentó conseguir la aproximación entre serbios y croatas. En política exterior, Yugoslavia debilitó sus relaciones con Francia e Inglaterra e intentó un acercamiento a Italia y Alemania. El gobierno encabezado por Paul trató de acercarse al Vaticano mediante el Concordato de 1935, pero los radicales serbios y la iglesia ortodoxa consiguieron la anulación del concordato dos años después.
Aunque al comenzar la Segunda Guerra Mundial Yugoslavia se declaró neutral, el regente Paul se vio obligado a firmar con Alemania los pactos de Acero y No Agresión (1939), pero, a pesar de estos tratados, tropas alemanas atravesaron territorio yugoslavo con material de guerra, lo que provocó un golpe de estado (25 de marzo de 1941) encabezado por el general Dusan Simovic, que depuso a Paul y elevó al trono al joven príncipe Pedro.
Pedro II fue el último rey de Yugoslavia y gobernó hasta el 6 de abril de 1941, en que el bombardeo de Belgrado supuso de facto la liquidación de Yugoslavia. El regente Paul se vio obligado a abandonar el país junto con su familia, refugiándose en Grecia. Fue capturado por las fuerzas británicas al final de la guerra y, tras ser retenido en Kenya, fue liberado y se estableció en París, donde residió hasta su muerte.
En el interior, el gobierno intentó conseguir la aproximación entre serbios y croatas. En política exterior, Yugoslavia debilitó sus relaciones con Francia e Inglaterra e intentó un acercamiento a Italia y Alemania. El gobierno encabezado por Paul trató de acercarse al Vaticano mediante el Concordato de 1935, pero los radicales serbios y la iglesia ortodoxa consiguieron la anulación del concordato dos años después.
Aunque al comenzar la Segunda Guerra Mundial Yugoslavia se declaró neutral, el regente Paul se vio obligado a firmar con Alemania los pactos de Acero y No Agresión (1939), pero, a pesar de estos tratados, tropas alemanas atravesaron territorio yugoslavo con material de guerra, lo que provocó un golpe de estado (25 de marzo de 1941) encabezado por el general Dusan Simovic, que depuso a Paul y elevó al trono al joven príncipe Pedro.
Pedro II fue el último rey de Yugoslavia y gobernó hasta el 6 de abril de 1941, en que el bombardeo de Belgrado supuso de facto la liquidación de Yugoslavia. El regente Paul se vio obligado a abandonar el país junto con su familia, refugiándose en Grecia. Fue capturado por las fuerzas británicas al final de la guerra y, tras ser retenido en Kenya, fue liberado y se estableció en París, donde residió hasta su muerte.
San Pablo de Tarso
(Saulo de Tarso) Apóstol del cristianismo que él transformó en religión universal (Tarso, Cilicia, h. 4/15 - Roma ?, h. 64/68). Era hijo de judíos fariseos de cultura helenística y con ciudadanía romana. Fue contemporáneo de Jesucristo e incluso estuvo en Jerusalén en la misma época que él, aunque probablemente no se conocieron.
San Pablo (óleo de El Greco)
Pablo tenía una sólida formación teológica, filosófica, jurídica, mercantil y lingüística (hablaba griego, latín, hebreo y arameo). Participó en las primeras persecuciones contra los cristianos. Pero durante un viaje a Damasco, poco después de la crucifixión de Jesucristo, se convirtió a la nueva fe, que por entonces era considerada una secta herética del judaísmo (según su propio relato, fue el mismo Jesús el que se le apareció).
Desde entonces San Pablo se convirtió en el más ardiente propagandista del cristianismo, que contribuyó a extender más allá del pueblo judío, entre los gentiles: viajó como misionero por Grecia, Asia Menor, Siria y Palestina; y escribió misivas (las encíclicas) a diversos pueblos del entorno mediterráneo.
Los escritos de San Pablo adaptaron el mensaje de Jesús a la cultura helenística imperante en el mundo mediterráneo, facilitando su extensión fuera del ámbito cultural hebreo en donde había nacido. Al mismo tiempo, esos escritos constituyen una de las primeras interpretaciones del mensaje de Jesús, razón por la que contribuyeron de manera decisiva al desarrollo teológico del cristianismo (se atribuyen a San Pablo más de la mitad de los libros del Nuevo Testamento).
Proceden de la interpretación de San Pablo ideas tan relevantes para la posteridad como la del pecado original; la de que Cristo murió en la cruz por los pecados de los hombres y que su sufrimiento puede redimir a la humanidad; o la de que Jesucristo era el mismo Dios y no solamente un profeta. También introdujo en la doctrina cristiana el rechazo de la sexualidad y la subordinación de la mujer, ideas que no habían aparecido en las predicaciones de Jesucristo.
En su esfuerzo por hacer universal el mensaje de Jesús, San Pablo lo desligó de la tradición judía, insistiendo en que el cumplimiento de la ley (los mandatos bíblicos) no es lo que salva al hombre de sus pecados, sino la fe en Cristo; en consecuencia, polemizó con otros apóstoles hasta liberar a los gentiles de las obligaciones rituales y alimenticias del judaísmo (incluida la circuncisión). En el país de los judíos fue mal acogido; estando en Jerusalén fue detenido, juzgado y enviado a Roma. Probablemente murió allí ejecutado.
San Pablo (óleo de El Greco)
Pablo tenía una sólida formación teológica, filosófica, jurídica, mercantil y lingüística (hablaba griego, latín, hebreo y arameo). Participó en las primeras persecuciones contra los cristianos. Pero durante un viaje a Damasco, poco después de la crucifixión de Jesucristo, se convirtió a la nueva fe, que por entonces era considerada una secta herética del judaísmo (según su propio relato, fue el mismo Jesús el que se le apareció).
Desde entonces San Pablo se convirtió en el más ardiente propagandista del cristianismo, que contribuyó a extender más allá del pueblo judío, entre los gentiles: viajó como misionero por Grecia, Asia Menor, Siria y Palestina; y escribió misivas (las encíclicas) a diversos pueblos del entorno mediterráneo.
Los escritos de San Pablo adaptaron el mensaje de Jesús a la cultura helenística imperante en el mundo mediterráneo, facilitando su extensión fuera del ámbito cultural hebreo en donde había nacido. Al mismo tiempo, esos escritos constituyen una de las primeras interpretaciones del mensaje de Jesús, razón por la que contribuyeron de manera decisiva al desarrollo teológico del cristianismo (se atribuyen a San Pablo más de la mitad de los libros del Nuevo Testamento).
Proceden de la interpretación de San Pablo ideas tan relevantes para la posteridad como la del pecado original; la de que Cristo murió en la cruz por los pecados de los hombres y que su sufrimiento puede redimir a la humanidad; o la de que Jesucristo era el mismo Dios y no solamente un profeta. También introdujo en la doctrina cristiana el rechazo de la sexualidad y la subordinación de la mujer, ideas que no habían aparecido en las predicaciones de Jesucristo.
En su esfuerzo por hacer universal el mensaje de Jesús, San Pablo lo desligó de la tradición judía, insistiendo en que el cumplimiento de la ley (los mandatos bíblicos) no es lo que salva al hombre de sus pecados, sino la fe en Cristo; en consecuencia, polemizó con otros apóstoles hasta liberar a los gentiles de las obligaciones rituales y alimenticias del judaísmo (incluida la circuncisión). En el país de los judíos fue mal acogido; estando en Jerusalén fue detenido, juzgado y enviado a Roma. Probablemente murió allí ejecutado.
Pablo de Samosata
(Samosata, c. 200-?, después de 273) Prelado y hereje antioqueno. Obispo de Antioquía (260), inquietó desde el 264 al episcopado del Asia Menor con su enseñanza, según la cual el Padre es el único que existe de manera sustancial y el Verbo sólo es un sonido proferido por su boca; Jesús, por tanto, sólo es un hombre. Se reunieron varios sínodos contra él en Antioquía y fue depuesto por Aureliano.
San Pablo de la Cruz
(Ovada, 1694-Roma, 1775) Fundador de los pasionistas. Llamado en el siglo Paolo Francesco Danei, en 1737 fundó el monasterio de Orbetello, sede del Instituto de la Pasión. En 1770 creó la rama femenina de la congregación. Fue canonizado en 1867. Fiesta el 19 de octubre.
Pablo de Egina
(Egina, c. 600-?) Médico griego. Estudió y vivió en Alejandría antes de ser conquistada por los árabes. Redactó una enciclopedia (Hypomnema) en la que resumía la obra de Galeno y de Oreibasio, y en la que destaca la parte dedicada a la cirugía. Traducida al árabe, esta obra tuvo gran importancia para la medicina islámica y ulteriormente para el conocimiento médico medieval en Europa. La primera edición latina data de 1528.
Luis de Pablo
(Luis de Pablo Costales; Bilbao, 1930) Compositor español. La figura de este compositor es sin duda la más destacada de la vanguardia musical española. Miembro de la llamada Generación de 1951, aquella que, a partir de ese año, trató de abrir el raquítico y conservador mundo musical español a las corrientes que en Europa renovaron el panorama de la segunda mitad del siglo XX.
A los ocho años comenzó los estudios musicales; también muy tempranamente, con sólo trece años, a componer. La dedicación a la música quedó arrumbada temporalmente por la muerte del padre, que lo obligó a asumir las responsabilidades de la familia, a cursar derecho en la Universidad Complutense de Madrid, en donde se licenció en 1952, y al ejercicio de la profesión, como abogado de la compañía Iberia hasta 1958.
Pero ya en 1954 la BBC de Londres le estrenó Coral eucarístico, y su Quinteto para cuerda y clarinete fue premiado en el concurso Samuel Ros. En 1958 formó el grupo Nueva Música con Ramón Barce y al siguiente asistió a los cursos de verano de Darmstadt, punto de encuentro de la vanguardia europea de la época (Maderna, Boulez, Ligeti, Nono, Stockhausen...), marcada en ese tiempo por el serialismo.
Sus Invenciones (1955-1960) testimonian ya la incorporación de la técnica serialista, y se entrega a una labor divulgadora que, de forma paralela, le ocupará los años siguientes: conferenciante, traductor de la biografía de Schönberg, organizador de los conciertos Tiempo y Música, presidente de las Juventudes Musicales entre 1960 y 1963... Se proyecta internacionalmente con Radial (1960), en el I Festival de Palermo, y en los Festivales de Darmstadt con Libro para el pianista (1961) y Polar (1962), dirigida esta obra por el mítico Bruno Maderna.
En la evolución de esos años reemplaza, o compatibiliza, el serialismo con la aleatoriedad, siguiendo la tendencia común de la vanguardia, que en su caso tiene fecha clave en 1965, con la creación del Grupo Alea, el primer estudio de música electroacústica español. Profesor del Conservatorio de Madrid desde 1971, la organización en 1972 de los Encuentros de Pamplona determinaría su exilio temporal: acusado por el régimen de hacerle el juego a la izquierda, y por ETA, que secuestrará a uno de los mecenas del encuentro el industrial Juan Huarte, de apuntalar la dictadura franquista.
Antes de regresar a España, aún con vida el dictador, dará clases en las universidades de Buffalo, Ottawa y Montreal. En los últimos años muestra el interés por las músicas étnicas no europeas, que usa como fuente de inspiración harmónica y melódica. En su catálogo de 2001 figuran más de 130 obras, entre ellas Imaginario II (1967), Zurezko olerkia (1975) y las óperas Kiu (1982), El viajero indiscreto (1988), La madre invita a comer (1992) y La señorita Julia (2000). Las dificultades encontradas para el estreno de esta última hablan de la persistencia de algunas de las condiciones que en 1951 movilizaron a los músicos más inquietos de su generación.
A los ocho años comenzó los estudios musicales; también muy tempranamente, con sólo trece años, a componer. La dedicación a la música quedó arrumbada temporalmente por la muerte del padre, que lo obligó a asumir las responsabilidades de la familia, a cursar derecho en la Universidad Complutense de Madrid, en donde se licenció en 1952, y al ejercicio de la profesión, como abogado de la compañía Iberia hasta 1958.
Pero ya en 1954 la BBC de Londres le estrenó Coral eucarístico, y su Quinteto para cuerda y clarinete fue premiado en el concurso Samuel Ros. En 1958 formó el grupo Nueva Música con Ramón Barce y al siguiente asistió a los cursos de verano de Darmstadt, punto de encuentro de la vanguardia europea de la época (Maderna, Boulez, Ligeti, Nono, Stockhausen...), marcada en ese tiempo por el serialismo.
Sus Invenciones (1955-1960) testimonian ya la incorporación de la técnica serialista, y se entrega a una labor divulgadora que, de forma paralela, le ocupará los años siguientes: conferenciante, traductor de la biografía de Schönberg, organizador de los conciertos Tiempo y Música, presidente de las Juventudes Musicales entre 1960 y 1963... Se proyecta internacionalmente con Radial (1960), en el I Festival de Palermo, y en los Festivales de Darmstadt con Libro para el pianista (1961) y Polar (1962), dirigida esta obra por el mítico Bruno Maderna.
En la evolución de esos años reemplaza, o compatibiliza, el serialismo con la aleatoriedad, siguiendo la tendencia común de la vanguardia, que en su caso tiene fecha clave en 1965, con la creación del Grupo Alea, el primer estudio de música electroacústica español. Profesor del Conservatorio de Madrid desde 1971, la organización en 1972 de los Encuentros de Pamplona determinaría su exilio temporal: acusado por el régimen de hacerle el juego a la izquierda, y por ETA, que secuestrará a uno de los mecenas del encuentro el industrial Juan Huarte, de apuntalar la dictadura franquista.
Antes de regresar a España, aún con vida el dictador, dará clases en las universidades de Buffalo, Ottawa y Montreal. En los últimos años muestra el interés por las músicas étnicas no europeas, que usa como fuente de inspiración harmónica y melódica. En su catálogo de 2001 figuran más de 130 obras, entre ellas Imaginario II (1967), Zurezko olerkia (1975) y las óperas Kiu (1982), El viajero indiscreto (1988), La madre invita a comer (1992) y La señorita Julia (2000). Las dificultades encontradas para el estreno de esta última hablan de la persistencia de algunas de las condiciones que en 1951 movilizaron a los músicos más inquietos de su generación.
Pablo
(?-Ravena, 727) Exarca de Ravena. Fue encargado por el emperador de Bizancio León III de deponer al papa Gregorio II tras la sublevación romana contra el pago de impuestos (725) y contra el edicto iconoclasta (726). Murió degollado.
Juho Kusti Paasikiwi
(Juho Kusti Paasikivi o Paasikiwi; Tampere, 1870 - Helsinki, 1956) Político y diplomático finlandés que fue presidente de Finlandia (1946-1956). Su política se caracterizó por el esfuerzo por mantener la independencia de Finlandia frente a la Unión Soviética. Su estrategia, conocida como "Vía Paasikivi", consolidó las relaciones amistosas con la URSS y la neutralidad de Finlandia en el contexto internacional de la Guerra Fría.
Estudió derecho e historia en las universidades de Estocolmo, Uppsala y Leipzig. En 1902-1903 trabajó como profesor de derecho en la Universidad de Helsinki, tras lo cual se dedicó a los negocios empresariales y bancarios. En estos años comenzó a interesarse por la política de forma activa. Su posicionamiento político fue, desde el principio de su carrera, realista, al comprender la difícil tesitura en la que se hallaba su pequeño país, integrado como Gran Ducado en el Imperio ruso. Su defensa de la autonomía finlandesa se basó en una política de contemporización con las autoridades zaristas, integrándose en el llamado Partido de los Conformistas de la Vieja Finlandia, que abogaba por una política de "conformidad" con los decretos ilegales que impusieron la intervención de Rusia en los asuntos internos del Gran Ducado.
En 1907 fue elegido miembro del Parlamento (Eduskunta) finlandés y, durante el año siguiente, ocupó la cartera ministerial de finanzas. En 1909 renunció a su cargo como forma de protestar contra las medidas de rusificación de Finlandia puestas en marcha por las autoridades rusas. Tras su renuncia, volvió a ocuparse de sus muchos negocios empresariales y, en 1914, fue nombrado presidente del Banco Nacional de Finlandia, cargo que ocuparía durante las dos décadas siguientes.
Tras el fin de la Primera Guerra Mundial, que dio paso a la independencia de Finlandia, Paasikivi ocupó durante un corte espacio de tiempo el cargo de primer ministro en el primer gabinete de la recién creada República. Durante su breve mandato, promovió el acercamiento a la Alemania de la República de Weimar y abogó por la instauración de una monarquía constitucional en Finlandia.
Dirigió la delegación finesa que, el 14 de octubre de 1920, selló la Paz de Tartu (Estonia) con la Unión Soviética, tras defender ante el Parlamento la conveniencia de no intentar sacar partido del aislamiento internacional que padecía su poderoso vecino tras la Revolución comunista de 1917. Los años de la posguerra fueron, por otra parte, enormemente fructíferos para los negocios privados de Paasikivi, que se convirtió en uno de los principales financieros de su país.
En 1936 fue nombrado ministro embajador en Suecia, cargo que ocupó hasta que, en octubre de 1939, se le designó para encabezar la delegación diplomática encargada de la negociaciones con la Unión Soviética, después de que ésta reclamase la anexión de importantes zonas estratégicas del territorio finlandés. Paasikivi, siempre partidario de la conciliación, aconsejó a su gobierno ceder a las reclamaciones soviéticas, advirtiendo del peligro que entrañaba un enfrentamiento directo con la URSS en vísperas de la Segunda Guerra Mundial.
Las negociaciones resultaron un fracaso y estalló la guerra ruso-finesa (1939-1940), con desastrosas consecuencias para Finlandia. En marzo de 1940, Paasikivi fue de nuevo encargado de dirigir las conversaciones del armisticio como secretario de la Comisión de Paz Ruso-finesa. El acuerdo final de paz entregó a la URSS cerca de una décima parte del territorio finlandés, con una población aproximada de medio millón de habitantes.
Pocos días después de firmada la paz, Paasikivi fue nombrado ministro embajador en Moscú, pero la alineación del gobierno finlandés junto a la Alemania nazi le obligó a abandonar su puesto en mayo del año siguiente, cuando se produjo la ruptura de relaciones entre Alemania y la Unión Soviética que determinó la entrada de ésta en la Segunda Guerra Mundial.
Durante los siguientes tres años permaneció alejado del escenario político. En la primavera de 1944 fue designado miembro de la mesa negociadora de los frustrados acuerdos de paz entre Finlandia y la Unión Soviética. Cuando la derrota alemana hizo caer al gobierno filonazi de Finlandia, en noviembre de ese mismo año, Paasikivi fue elegido primer ministro de un gabinete de salvación nacional encargado de negociar los términos de la paz con la URSS Durante los dos años que duró su mandato, Paasikivi negoció con la Unión Soviética el cumplimiento integral de los acuerdos de paz firmados en septiembre de 1944.
En marzo de 1946, renunció a su cargo de primer ministro, al ser elegido presidente de la República en sustitución del general C. G. Mannerheim. Permaneció una década en la presidencia, hasta febrero de 1956. Durante estos años, procuró mantener la independencia de la presidencia respecto a los partidos políticos y continuó su política de cooperación con la Unión Soviética, encaminada a evitar cualquier conflicto que pusiera en peligro la independencia de Finlandia.
En 1955 consiguió la devolución del puerto de Porkkala, que en 1944 había sido cedido a la Unión Soviética como parte de los acuerdos de paz. A pesar de sus excelentes relaciones con Moscú, Paasikivi hizo lo posible por evitar que el comunismo soviético ganara influencia en el interior de Finlandia. Murió en Helsinki el 14 de diciembre de 1956, a la avanzada edad de 86 años.
Estudió derecho e historia en las universidades de Estocolmo, Uppsala y Leipzig. En 1902-1903 trabajó como profesor de derecho en la Universidad de Helsinki, tras lo cual se dedicó a los negocios empresariales y bancarios. En estos años comenzó a interesarse por la política de forma activa. Su posicionamiento político fue, desde el principio de su carrera, realista, al comprender la difícil tesitura en la que se hallaba su pequeño país, integrado como Gran Ducado en el Imperio ruso. Su defensa de la autonomía finlandesa se basó en una política de contemporización con las autoridades zaristas, integrándose en el llamado Partido de los Conformistas de la Vieja Finlandia, que abogaba por una política de "conformidad" con los decretos ilegales que impusieron la intervención de Rusia en los asuntos internos del Gran Ducado.
En 1907 fue elegido miembro del Parlamento (Eduskunta) finlandés y, durante el año siguiente, ocupó la cartera ministerial de finanzas. En 1909 renunció a su cargo como forma de protestar contra las medidas de rusificación de Finlandia puestas en marcha por las autoridades rusas. Tras su renuncia, volvió a ocuparse de sus muchos negocios empresariales y, en 1914, fue nombrado presidente del Banco Nacional de Finlandia, cargo que ocuparía durante las dos décadas siguientes.
Tras el fin de la Primera Guerra Mundial, que dio paso a la independencia de Finlandia, Paasikivi ocupó durante un corte espacio de tiempo el cargo de primer ministro en el primer gabinete de la recién creada República. Durante su breve mandato, promovió el acercamiento a la Alemania de la República de Weimar y abogó por la instauración de una monarquía constitucional en Finlandia.
Dirigió la delegación finesa que, el 14 de octubre de 1920, selló la Paz de Tartu (Estonia) con la Unión Soviética, tras defender ante el Parlamento la conveniencia de no intentar sacar partido del aislamiento internacional que padecía su poderoso vecino tras la Revolución comunista de 1917. Los años de la posguerra fueron, por otra parte, enormemente fructíferos para los negocios privados de Paasikivi, que se convirtió en uno de los principales financieros de su país.
En 1936 fue nombrado ministro embajador en Suecia, cargo que ocupó hasta que, en octubre de 1939, se le designó para encabezar la delegación diplomática encargada de la negociaciones con la Unión Soviética, después de que ésta reclamase la anexión de importantes zonas estratégicas del territorio finlandés. Paasikivi, siempre partidario de la conciliación, aconsejó a su gobierno ceder a las reclamaciones soviéticas, advirtiendo del peligro que entrañaba un enfrentamiento directo con la URSS en vísperas de la Segunda Guerra Mundial.
Las negociaciones resultaron un fracaso y estalló la guerra ruso-finesa (1939-1940), con desastrosas consecuencias para Finlandia. En marzo de 1940, Paasikivi fue de nuevo encargado de dirigir las conversaciones del armisticio como secretario de la Comisión de Paz Ruso-finesa. El acuerdo final de paz entregó a la URSS cerca de una décima parte del territorio finlandés, con una población aproximada de medio millón de habitantes.
Pocos días después de firmada la paz, Paasikivi fue nombrado ministro embajador en Moscú, pero la alineación del gobierno finlandés junto a la Alemania nazi le obligó a abandonar su puesto en mayo del año siguiente, cuando se produjo la ruptura de relaciones entre Alemania y la Unión Soviética que determinó la entrada de ésta en la Segunda Guerra Mundial.
Durante los siguientes tres años permaneció alejado del escenario político. En la primavera de 1944 fue designado miembro de la mesa negociadora de los frustrados acuerdos de paz entre Finlandia y la Unión Soviética. Cuando la derrota alemana hizo caer al gobierno filonazi de Finlandia, en noviembre de ese mismo año, Paasikivi fue elegido primer ministro de un gabinete de salvación nacional encargado de negociar los términos de la paz con la URSS Durante los dos años que duró su mandato, Paasikivi negoció con la Unión Soviética el cumplimiento integral de los acuerdos de paz firmados en septiembre de 1944.
En marzo de 1946, renunció a su cargo de primer ministro, al ser elegido presidente de la República en sustitución del general C. G. Mannerheim. Permaneció una década en la presidencia, hasta febrero de 1956. Durante estos años, procuró mantener la independencia de la presidencia respecto a los partidos políticos y continuó su política de cooperación con la Unión Soviética, encaminada a evitar cualquier conflicto que pusiera en peligro la independencia de Finlandia.
En 1955 consiguió la devolución del puerto de Porkkala, que en 1944 había sido cedido a la Unión Soviética como parte de los acuerdos de paz. A pesar de sus excelentes relaciones con Moscú, Paasikivi hizo lo posible por evitar que el comunismo soviético ganara influencia en el interior de Finlandia. Murió en Helsinki el 14 de diciembre de 1956, a la avanzada edad de 86 años.
Wolfgang Paalen
(Viena, 1907-México, 1959) Pintor austríaco. En 1928 se adhirió en París al grupo Abstraction-Création y luego al surrealismo. A partir de 1939, ya establecido en México, sus obras reflejan la influencia amerindia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)